SIETE MESES.
Muchos niños de siete meses ya gatean, explorando lo que les rodea. Nuestro hijo consigue levantarse, si se apoya en algo, y comenzará a tambalearse hacia adelante y hacia atrás.Transcurrido un tiempo, también logrará dar sus primeros pasos. Sin embargo debemos tener en cuenta que no todos los niños aprenden igual.
Puede darse el caso de que el niño dé su primer paso de lado ó hacia atrás, pero no tardará en corregir su dirección.Otros niños prefieren permanecer sentados o arrastrar el culito por el suelo, para después, pasar directamente de esta fase a la posición erguida. ¡ La verdad es que no están quietos ni un solo momento!.
El niño puede coger las cosas de una manera más sofisticada.
No emplea sólo la mano, sino que también utiliza los dedos.Las manos empiezan a serle muy útiles. Utiliza las dos indistintamente.Y puesto que ser zurdo, no es anómalo, dejemos que sea nuestro propio hijo quien escoja la que más le place.
OCHO MESES.
Pueden cambiar los horarios del sueño y las costumbres de las comidas.
Muchos niños quieren comer solitos con las manos.Pero, cuando les empiezan a salir los dientes, suelen perder por completo el interés por la comida, tardando mucho rato en comer.Lo único que podemos hacer es mantener la tranquilidad y no obligarles a comer.
Puede, que algunos niños sigan echando dos sueñecitos durante el día hasta los 14-15 meses,pero lo más normal es que a esta edad, casi todos los niños hagan sólo un sueñecito diario.
Tiene la edad de poder comprender un poco de firmeza.Puede que se haga el caprichoso antes de acostarse, pero no debemos permitirle que se canse demasiado. Y es que un gran cansancio puede provocar insomnio. Por ello a partir de este momento, es aconsejable marcarle unos horarios, que deberemos mantener durante bastante tiempo. Aunque sus rabietas hagan pensar lo contrario, nuestra firmeza y nuestras tentativas para calmar su excitación le daran seguridad.
El niño se prepara para hablar.El niño puede señalarnos lo que desea o seguir con la mirada lo que le indicamos. También es capaz de distinguir un objeto interesante entre otros, por lo que resulta oportuno ocultarle los objetos que no podamos darle.
Muchas de sus palabras, que para nosotros no tienen ningún significado, representan, lo que nos ha oído pronunciar, sólo que aún no puede hacerlo bien.
NUEVE MESES.
Quiere "correr" por la casa y tocarlo todo.
En estos momentos, es indispensable procurarle un ambiente seguro e higiénico.No debemos dejar a su alcance tijeras, cuchillos, ni detergentes.Debemos desenchufar los pequeños electrodomésticos después de usarlos, y girar hacia adentro todas las asas de las ollas ó los mangos de las sartenes puestas al fuego.Le explicaremos el significado de la palabra "quema " manteniendo su mano a cierta distancia del horno de la cocina para que pueda sentir su calor. Repetiremos el gesto con nuestra propia mano y la apartaremos dando muestras de dolor. El pequeño lo comprenderá.
El primer movimiento coordinado que el niño realiza consiste en sostener un objeto con la mano, mientras que con la otra lo golpea.
Sus juguetes preferidos son todos los que se mueven, aunque sigue adorando a su querido peluche y a su mamá.Su madre ha sido su primer juguete, y sigue siendo la protagonista de todos sus juegos.
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